lunes, 27 de julio de 2020

NUEVA DONACIÓN PARA NUESTRO ARCHIVO: UNA CARTA PATENTE DE 1887





Recientemente un descendiente de Don Francisco Villasante, quien fuera hermano terciario de nuestra Fraternidad a fin del Siglo XIX y miembro de una saga familiar que se integró en la fraternidad hasta bien entrado el siguiente siglo, nos ha realizado la donación de una Carta Patente original. Se trata de un importante documento pues hasta ahora carecíamos de algún ejemplar de este tipo de título que acreditaban a los hermanos su pertenencia a la Orden Tercera y por tanto de los derechos que podían ejercer y de las obligaciones que la congregación contraía con ellos sobre todo tras su fallecimiento. Hasta el momento sólo conocemos de la existencia de otro extendido por la Orden en beneficio de Doña Josefa Lasso de la Vega y Quuintanilla  y que se conserva en el Archivo Nobiliario del Marquesado de las Torres y Condado de Casa Galindo.
En la reunión o cabildo reconstituyente de la Orden celebrado el 23 de junio de 1978 algunas hermanas terciarias presentaron sus Cartas Patentes - extendidas casi cuarenta años antes- como demostración de la vigencia de la orden y de la existencia de un numeroso grupo que había venido celebrando los cultos a Nuestra Señora de los Dolores, no sólo como fieles devotos de la imagen, sino como hermanas de hábito y escapulario. Desgraciadamente este grupo de patentes se perdió en los trámites para el pleno reconocimiento de la fraternidad de Carmona por el Prior General en 2000. De ahí la importancia de poder contar con un original de este tipo de Carta Patente pues era de obligada entrega al ingreso de cada hermano al profesar en la Orden,
En las Reglas que rigieron  desde 1784 la vida de los terciarios Siervos de María de Carmona se determina en su Capítulo Segundo "Como han de ser admitidos los Pretendientes". Tras la solicitud del interesado en pertenecer a la Orden, debía realizarse un informe secreto a tenor de las constituciones de Martín V -se determinaba en el capítulo primero- y en el que se estipula que debían ser realizado por "dos de nuestros hermanos, aquellos a quien la Mesa lo cometiese, de vida y costumbres del pretendiente". La Regla encomienda "en conciencia" a estos redactores del informe para que lo ejecuten con toda fidelidad.
Debían observarse además las prescripciones que según las normas eclesiales y de la monarquía hispana eran de obligado cumplimiento para el ingreso de los miembros  en las corporaciones religiosas: "que no sea morisco, ni mulato, ni de oficio vil, ni castigado por el Sto. Tribunal de la Inquisición".
En el caso de ser admitido, el Pretendiente debía ser avisado por el Hermano Celador sobre el día de su "recepción que lo determinara la Junta...primeramente se le bestirá el Santo Escapulario por ntro. Hermano Corrector y hecho el voto, dará por su entrada solamente cuatro reales de vellón, y dos al tiempo que hagan su profesión, para lo qual señalamos a los que no lo han hecho seis meses de término, y a los que se recibieren de aquí en adelante un año, devera contase desde el día que bistan el escapulario y se anoten por hermanos" - C. 2-. extendiéndose la consiguiente Carta Patente acreditativa de su pertenencia.
Al inicio de la Orden Tercera en Carmona los hermanos no satisfacían más cuota que la de ingreso y que les aseguraba además un número determinado de misas a su fallecimiento; ya en la segunda mitad del siglo XIX se impondrá la cuota mensual, una vez que le han incautado las fincas y casas de los bienes de la Orden en Carmona y corresponderá esta aportación para mantenimiento de los cultos y salida procesional-.
Al mayordomo entre sus atribuciones correspondía avisar a la Junta de aquellos hermanos y hermanas "que no habían profesado, y ha pasado más del año de Noviciado"



Texto de la Carta Patente.
El texto es el usual para este tipo de documento como conocemos por otras congregaciones: el impreso fue realizado en la imprenta muy cercana al templo del donde residía la Orden Tercera, y que regentaba don José Moreno- Este impresor fue muy pródigo en publicaciones de toda índole desde novenas, septenarios.. hasta los famosos pliegos de cordel que se vendían por toda Andalucía. Don José Moreno tuvo la imprenta en la calle de las Descalzas nº 1- anteriormente en la calle Juan de la Cabra (desconocida en la actualidad)- para establecerla a partir de 1860  en la calle Madre de Dios.
El impreso tiene unas medidas de 31,5 cm. x 43,5 cm. La caja de texto se encuentra enmarcada por una fina línea y la decoración se ha reservado a modo de esquineras con dibujos geométricos de gusto decimonónico.


El escudo de la Orden en Carmona  aparece nimbado por un resplandor: el corazón con una espada se encuentra rodeado por una corona de flores - así se representa también en el dosel de cultos realizado en los primeros años del siglo XX- y las llamas se han sustituido por hojas de laurel símbolo del triunfo del dolor; sobre él se ha colocado otra aureola conteniendo al  Espíritu Santo en forma de paloma; bajo el corazón transfixionado aparece la media luna en clara alusión mariana.
En la transcripción del texto señalamos con cursiva y en negrita aquellos espacios que debían rellenarse a mano y que no estaban impresos.
Texto:
"SIERVOS (escudo) DE MARÍA.
VIRGO DOLOROSISIMA ORA PRO NOBIS.
LA VENERABLE CONGREGACION Y ORDEN TERCERA DE Siervos de Maria Santisima de los Dolores, establecida con Real aprobación en la Iglesia Parroquial de N. Sr. el Salvador de esta Ciudad de Carmona, etc.
Por la presente declaramos haber recibido por Nuestro Hermano y Consiervo a D. Francisco Villasante vistiendo nuestro Santo Escapulario y habiendo hecho su profesion, conforme a lo prevenido en la regla de nuestro Instituto.
Por lo cual cumpliendo las obligaciones de tal Hermano satisfaciendo la anual limosna para los cultos de Nuestra Dolorosisima Madre y cuatro maravedis en cada cuatro semana. se le aplicarán en fin de sus dias (presentanda esta Patente) siete misas rezadas, para cuyo fin libramos firmada por Ntro. Hermano Mayor Secretario Carmona 20 del mes de Mayo de mil ochocientos 87,
El Hermano Mayor
(Firma y rúbrica): Eduardo José Carreras
El Secretario
(Firma y rúbrica):Diego Zabala
__________________

(Margen inferior) CARMONA 1854;- IMP. DE D. JOSE M. Moreno, DESCALZAS, N 1"



En el documento aparecen las firmas  rubricadas del Hermano Mayor y del Secretario.
Don Eduardo José Carreras y Cabeza, sacerdote, fue nombrado Prior en el Cabildo de elecciones celebrado el 10 de Noviembre de 1876, siendo el Corrector de la Orden tercera el presbítero Don Antonio Álvarez y Guerrero, En ese mismo cabildo fue nombrada también Doña Dolores Quintanilla como Priora de las hermanas terciarias. El Padre Carreras fue reelegido  en el cargo sucesivamente hasta 1898 en el que se dispone que lo sea Don Emilio Zabala y Domínguez, "cura ecónomo de la Parroquia del Salvador y Capellán de Honor de Su Magestad".
Don Diego Díaz Caro accedió en 1879 a la Secretaría por designación ante la incapacidad de seguir en el cargo del anterior secretario. Hasta 1889 vendrá siendo reelegido para este cargo, momento en el que lo será Torcuato Barrera. En 1894 un hermano de Don Diego, Manuel Díaz Caro será nombrado también como secretario, cargo que ocupará hasta los primeros años del siglo XX.
P.e. Agradecer a Don Ignacio Cañaveral su interés en que este documento familiar forme parte de nuestro Archivo Histórico.
A.O.T.S.C.
.- Libro de Cavildos y Junta de la congregacion y ord. tercero de los Siervos de María Stma. de los Dolores establecida con la Rl. aprovación de Nro. señor el salvador desta ciudad de Carmona. año de 1784.
.- Libro de acuerdos del V.O.T. de S. año 1851. S.p.


lunes, 13 de julio de 2020

INICIADA LAS LABORES DE RESTAURACIÓN Y CONSERVACIÓN DE UNA TÚNICA DEL NIÑO JESÚS.




El Capítulo General de la Orden Seglar aprobó en septiembre del año pasado diversas restauraciones de piezas pertenecientes a nuestro patrimonio, trabajos que se han visto ralentizados debidos a los meses de confinamiento. En este mes de julio se ha trasladado al taller de conservación CYRTA TEXTILES uno de los  vestidos de la imagen del Niño Jesús, en concreto el catalogado en el "Inventario de bienes del Dulce Nombre de Jesús" con la signatura F.A.T. 19 - Fondo Antiguo Textil-. Se trata de una obra bordada en hilo de plata con lentejuelas metálicas , canutillos plateados y dorados, y aljófares o perlas pequeñas, sobre seda con ligamento de tipo gros de color melocotón. En el extremo inferior de la falda como de las mangas existe un encaje metálico de tipo Punto de España, realizado a bolillos en hilos metálicos plateados.



 

Estado de conservación.

La pieza presenta un estado de conservación deficiente ya que sufre una serie de alteraciones que, pese a no poner en peligro su integridad, sí convendría frenar para prevenir daños mayores.



 

En lo que al tejido principal se refiere, mencionar la ligera deformación que presenta, principalmente en la zona del cuerpo y mangas. Esto se debe, presumiblemente, al uso específico que posee la obra. Así mismo, en zonas puntuales se aprecian desgastes y pérdidas puntuales de material. Esto se aprecia en la zona de los hombros así como en la parte de la cintura y que se debe al roce del cordón que sirve para ceñir el vestido a la imagen del Niño.

 

En lo que a la ornamentación bordada se refiere, destaca el oscurecimiento generalizado que presenta y cuyo origen se debe a la presencia de plata en la aleación de los metales constitutivos. Esta misma alteración la presenta el encaje decorativo



 

Existe igualmente la pérdida puntual de elementos constitutivos de la ornamentación.

 

Criterios de conservación



 

Se acometen estos trabajos de restauración con criterios conservacionistas pues hay que destacar los diversos valores que la pieza posee entre los que hay que destacar el artístico, técnico, documental e histórico y que condicionan/determinan que sea la conservación de la pieza prime sobre cualquier otro tipo de premisa. Manteniendo por encima de todo el respeto por el original que debe ser conservado íntegramente sin opción a excluir o desechar ninguna de sus partes. Siendo reversibles cualquiera de las intervenciones sobre la misma.

Principalmente se someterá la base textil a trabajos de Consolidación en aquellas zonas en las que el tejido de seda se encuentre debilitado o muestre pérdidas puntuales de material. Para ello será necesaria la colocación de soportes puntuales, debidamente teñidos, que se unirán mediante costura al tejido principal. También se someterá a un proceso de Humidificación con el fin de hidratar las fibras constitutivas, se aplicará vapor frio de forma controlada. Esto, además, aportará a las fibras una mayor flexibilidad y resistencia que ayudará a corregir las distintas deformaciones que posee el soporte. 

 

La limpieza de la pieza se realizará mediante microaspiración y físico-química, sobretodo en los bordados.

 


 

Taller Cyrta Textil

Debido al interés de conservar el original de todos los elementos del vestido del Niño Jesús, la Orden Seglar encargó el estudio de su restauración al afamado taller Cyrta, especializados en obras textiles, cuya metodología y criterios actuales de restauración le han logrado el reconocimiento unánime de la crítica especializada.  Son multitud de las obras textiles de toda España las que han pasado por su taller pertenecientes a fundaciones e instituciones civiles así como religiosas entre las que se encuentran tanto las puramente devocionales como obras de carácter museísticos.  Recientemente han firmado un convenio con la Hermandad de la Macarena para el mantenimiento y conservación de su amplio patrimonio textil habiendo ya intervenido sobre el manto camaronero de la Virgen Titular. Igualmente otras hermandades de la ciudad de Sevilla y el Arzobispado han confiado al taller Cyrta emblemáticas piezas.

viernes, 3 de julio de 2020

COLABORACIÓN CON LAS COMUNIDADES DE VIDA CONSAGRADA




Nuestra Fraternidad viene desde hace años colaborando activamente con las comunidades religiosas de nuestra ciudad, durante los meses de confinamiento se les ha ayudado a mantener su confinamiento por lo que un grupo de hermanos les han realizado los servicios de compra o de abastecimiento, así como asistencia en otras necesidades para evitar que tuvieran que salir de sus conventos.




Ante la llegada del verano las religiosas dominicas del convento de Madre de Dios requirieron nuestra ayuda para la colocación de los cinco grandes toldos que cubren el patio principal, un numeroso grupo de hermanos acudieron a su llamada y se pudo colocar en una tarde las diferentes velas que aportan frescor al claustro.