El pasado domingo día 2 tras la
celebración de la Eucaristía se procedió a la presentación de las ocho pinturas
de los tondos de las bambalinas del palio obra de N.H. Luis Mª Maqueda Toro,
Lcdo. en Restauración; también al nuevo techo de palio
N. H. Fernando Mª de la Maza como Coordinador de la
realización del palio de María Santísima de los Dolores explicó la simbología
que subyace en esta obra donde nada se ha dejado a la improvisación y se ha buscado
plasmar un lenguaje simbólico la catequesis del palio, recurriéndose al valor
bíblico de los números.
TECHO DE PALIO
Obra de Juan González.
Siguiendo el estilo neo-renacentista
del baquetón y de la decoración de las bambalinas, la decoración del techo se
organiza como un artesonado sostenido por ménsulas de las que penden cuatro piñas de corte renacentista que
representan el plano de lo terrestre o puntos cardinales ya que este número se refiere en la Biblia a todo aquello que continúa luego de la
revelación de Dios, que se da en sus obras creadoras. Pues corresponde a
las cosas que tienen un comienzo, a las cosas que están hechas, a las cosas
materiales, en resumen el número cuatro en la biblia es considerado como el
número del mundo. Constituyen también los cuatro espacios o banderas que
rodeaban la tienda del encuentro en el centro del campamento de Israel en
el Éxodo, que fundamenta aún más la idea del palio como cobertura del arca de
la alianza.
Siguiendo la visión de
Ezequiel (10:14) en los extremos contrarios a los puntos cardinales se sitúan
los cuatro seres o querubines cada uno de ellos
tenía cuatro caras y cuatro alas, y que movían el carro de Dios y que
igualmente aparecen en el Apocalipsis. (4:7) y que acompañan a Dios en su
manifestación.
El centro
del palio es el nombre de Dios en hebreo o
tetragramatón יהוה compuesto por las cuatro letras transcritas
como YHVH (YaHVeh) con el significado de “Yo soy el que soy” o como en e libro
del Apocalipsis: «Yo soy el que es y era y ha
de venir»( 1:8).
TONDOS
DE LAS BAMBALINAS
Obra
pictórica de Luis Maqueda Toro
Forman
un conjunto de ocho círculos, número que nos remite la «resurrección», porque el
antiguo orden de las cosas terminó, un nuevo número surge entonces para
tipificar la vida salida de la muerte. En resumen, el número ocho es el número
especialmente asociado con la «resurrección» y la «regeneración», y con el comienzo
de una nueva era u orden. Cristo resucitó de los muertos «el primer día de la
semana», que necesariamente fue el octavo día.
En estos tondos figuran
las mujeres fuertes de la Biblia como pre-figuras de María. Mujeres a través de
las cuales Dios salva o ayuda al pueblo de Israel en los momentos difíciles.
Estas figuras forman parejas en torno a las cuatro cartelas exteriores en las
que irán las pre-figuras de María como Abogada, Auxiliadora, Socorro y
Mediadora siguiendo los títulos que la Iglesia le reconoce en la Constitución
Dogmática de la Lumen Gentium (Cap. 62).
La técnica utilizada,
basada en los tratados de pintura del
renacimiento italiano, consigue un efecto muy especial pues realizadas
sobre la plata directamente hacen visibles las pinturas bajo unas especiales
condiciones de iluminación. Esta técnica ha permitido respetar al máximo el
aspecto argénteo de la obra y a la vez completar el proyecto iconográfico del
palio.
Las pinturas se han
realizado siguiendo el estilo impuesto por el modernismo del que es deudor las
línea artística del palio.
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