jueves, 7 de mayo de 2020

LA SANTISIMA VIRGEN MARIA, MADRE Y MEDIADORA DE GRACIA.


8 de mayo. Memoria opcional para los Siervos de María.



" En tu misericordia has realizado grandes cosas en su Madre, la Bienaventurada Virgen María: la has constituido madre y abogada nuestra, para que en ella los afligidos encontraran consuelo, los enfermos salud, los pobres ayuda, los pecadores refugio, todos los hombres misericordia y gracia. Por eso, con los ángeles y los arcángeles y con todos los coros celestiales, cantamos sin cesar el himno de tu gloria" canta el prefacio de la Misa que en el año 1971, aprobó la Sagrada Congregación para el Culto Divino y que se encuentra en el Misal de la Orden de los Siervos  con el título de Beataae Mariae Virginis gratiae Matris ac Mediatricis que, en fiel armonía con la doctrina del Concilio Vaticano II, conmemora a la vez la función maternal y el papel mediador de la Santísima Virgen.  Los textos  eucológicos - de las oraciones de la liturgia- son de gran importancia para definir el papel de María como Mediadora o asociada a Cristo.

Concesión de la Misa y Oficio Litúrgico de la memoria litúrgica. 1918
La celebración de esta Misa se debe al movimiento mariano mediacionista que inició en Bélgica el Cardenal Mercier en la segunda mitad del XIX. El episcopado de ese país en unión del clero, universidades, etc. elevó en 1913 una súplica a San Pío X para que fuera elevada la Mediación a rango de Dogma. En 1918 se concede la Misa y el Oficio de la Virgen Mediadora de Todas las Gracias a la Iglesia belga y con posterioridad a algunas órdenes religiosas y diócesis, en la de Sevilla se concedió en 1980 como memoria obligatoria para el 5 de agosto.


La Mediación de María en el Concilio Vaticano II.
En el primer esquema presentado a los Padres conciliares se desarrollaba este tema en el depósito de la Fe aunque la última sitúa la mariología en la historia de la salvación, mientras que el proyecto primero partía del magisterio de la Iglesia.  El tema fue muy debatido a lo largo de todo el Concilio y aprobado el 21 de noviembre de 1964 e incluido en el C. VIII  de Lumen Gentium. Aunque la palabra «mediadora» sólo aparece una vez en todo el capítulo, sin embargo la idea de la mediación de María está presente de modo constante en todo el texto. No podía ser de otro modo tratándose de una realidad o función inseparable de su misión maternal: "Por este motivo, la Santísima Virgen es invocada en la Iglesia con los títulos de Abogada, Auxiliadora, Socorro, Mediadora. Lo cual, sin embargo, ha de entenderse de tal manera que no reste ni añada nada a la dignidad y eficacia de Cristo, único Mediador” (LG 62). Temas que inspiran y desarrolla la iconografía de nuestro Palio.
Misa de la B.V.M. Madre de la Gracia y Mediadora. 1971
La Congregación para el Culto Divino aprobó en 1971 los textos de esta Misa en la que se conjunta el papel maternal de María con su mediación, cuyos textos eucológicos se encuentran en el Misal de la Virgen con el número 30.  No aparece en el Calendario Universal de la Iglesia pero se celebra en multitud de Diócesis y aparece en los misales de diferentes órdenes que lo han solicitado, como es en el caso de los Siervos de María  concedida como Memoria para el 8 de mayo.  Con pequeñas variantes -como es en nuestro caso en el que cambia el texto del prefacio- el esquema general  nos presenta a la santísima Virgen, «madre y medianera de gracia», porque Dios Padre, «por misterioso designio de (su) providencia» (Colecta: cf. Prefacio), la asoció a la obra de la redención humana (cf. Colecta, Prefacio.) Madre de la gracia es la Virgen maría, porque llevó «en (su) seno virginal al Dios y hombre verdadero» (Antífona de entrada) y nos dio al mismo «Autor de la gracia» (Colecta; cf. Aleluya). Medianera de la gracia es la Virgen María, porque estuvo asociada a Cristo en la obra de procurarnos la gracia suprema, esto es, la redención y la salvación, la vida divina y la gloria sin fin (cf. LG 61). En el formulario la «mediación» de la santísima Virgen es rectamente interpretada como una «generosa entrega de amor de madre» (Prefacio): «de intercesión y de gracia, / de súplica y de perdón, / de reconciliación y de paz» (Prefacio).


Origen histórico y evolución del tema de la Mediación. Siglos III/XIX
Aunque es una verdad no definida, la mediación de la Virgen es una creencia que se desarrolla a partir de la solicitud maternal de María por todo el género humano en la misión redentora de su Hijo, que forma un todo con ella, y se extiende a todas las gracias que nos ha adquirido Cristo. El pueblo cristiano la ha celebrado desde tiempo inmemorial: por ejemplo la oración Sub tuum praesidium, escrita en griego aproximadamente en el 250 y otra oración de Efrén de Siria (306-373) afirma: Después del mediador, la mediadora de todo el mundo. En el siglo VII está ampliamente desarrollada en los escritos del Doctor de la Mediación que es San Germán de Constantinopla. Las advocaciones marianas  de  Amparo, Auxiliadora, Consolación, Gracias, Merced, Milagro, Misericordia, Patrocinio, Providencia, Refugio, Remedio, Socorro, plasman la mediación.  La himnología medieval occidental canta el papel de María como abogada y mediadora, las predicaciones de san Bernardino ayudaron a extender esta doctrina que se incluye en la segunda parte del avemaría.

En nuestro país el Rey Felipe IV solicitó la fiesta del Patrocinio de la Virgen y que le fue concedida por el Papa  Alejandro VII en 1656, recogiendo la herencia de la piedad medieval y los antecedentes en la liturgia hispánica.   A partir de  la segunda mitad del siglo XVIII la mariología conocerá  un auge inaudito que buscará la declaración de varios dogmas marianos.


No hay comentarios:

Publicar un comentario