TERMINADOS LOS TRABAJOS DE CONSOLIDACIÓN Y RESTAURACIÓN DE LA CORONA DE NUESTRA SEÑORA.

Con motivo de los próximos cultos solemnes que la Fraternidad celebrará en la festividad de nuestros Siete Santos Padres Fundadores, la imagen de la Santísima Virgen de los Dolores lucirá nuevamente su primitiva corona. Hace ahora un año el Consejo de Gobierno de la Orden Seglar decidió someter la antigua y originaria presea de su imagen Titular a una profunda restauración, una vez observado su progresivo deterioro. Se contactó con el orfebre Don Jesús Domínguez que hace ya unos años había procedido a la consolidación de la medialuna que forma parte de este juego, que hacia 1783 realiza el orfebre José Adrián Camacho. Este platero cuenta con numerosas obras en las parroquias y conventos de la Ciudad, en la que fue además alcalde examinador de ese gremio - según documentó Mejías Álvarez-. La corona figuró en la exposición de la Caja de ahorros San Fernando de 1990.

La corona es de plata dorada, de tipo imperial; con ráfaga de doble bisel y estrellas de ocho puntas. La decoración ha sido realizada a basa de rocalla y grandes flores, mostrando las marcas de su autor tanto en el canasto como en la ráfaga. En el centro de la corona figura el corazón traspasado por la espada, éscudo que la V.O.T. Servita de Carmona utilizó desde sus inicios como

Los trabajos han consistido principalmente en la consolidación de los imperiales y de la ráfaga, que presentaban diversos cortes en la plata debido a la pérdida y eliminación progresiva de los elementos de fijación. Se han realizado nuevas  estrellas siguiendo como modelo las originarias y que en algún momento le había sido sustituidas. Igualmente se han reforzado las piezas de agarre y se le ha añadido un nuevo arco interior. Todas las piezas nuevas se han realizado en plata de primera ley. En  talleres cordobeses se ha procedido a un nuevo baño de oro, ya que por la oxidación del paso de los años y su uso permanente en tiempos atrás, las dos partes de la corona presentaban diferentes tonalidades.
           La restauración se ha sufragado en parte gracias a las aportaciones de los hermanos y fieles.
          Igualmente se ha presentado a los hermanos dos últimas donaciones: un rosario de principios del siglo XIX, con cuentas de cristal de roca y filigrana de plata sobredorada y un relicario del siglo XVIII de filigrana de plata, con pinturas sobre cristal de la Soledad de los Bernardos y la Santa Faz de Jaén